Empieza el verano con la caida de ese «trasto feo» que durante décadas se sostuvo en constante porfía con la torre de la catedral por ver cual es mas fuerte y quién sostiene el cielo de la plaza de España.
Pero no hay comparación, la piedra colocada por la raza de los antiguos hombres está hecha para vivir la eternidad, y ver morir las generaciones de estos artilugios,tan modernos y fascinantes como fugaces.